-Hay felicidad.
-¿Dónde?
-En todos los sitios del mundo, sólo tienes que pensar en ella, y verás que aún que se esconda, sigue allí. Sólo hay que llamarla.
-Hace tiempo que no la veo.
-Quizás es que no la has tratado bién..
-¿Cómo se hace eso?
-No obedecer al destino, y dejar que la tristeza te imvadiera, es una forma de cerrarle la puerta a tu felizidad,
¿No crees?
¿ Que pasa si lloro? ¿Que pasa si río? ¿ Te da igual?. Así me siento, ¿Lo entendeís?...Yo tampoco.
hola!
ResponderEliminargracias por pasarte x mi blog!!
aora le voy a echar un vistazo al tuyo :)
besotes